Por: Carlos Rivas*
Como un sueño horrible, como una pesadilla son los gobiernos de las elites. Los poderosos, cuando les toca ejercer el poder político, porque de forma fáctica dominan al mundo, sólo ofrecen desesperanza, terror, persecuciones, violaciones a los Derechos Humanos, impunidad (para los pares), en síntesis, son el reflejo más directo de la decadencia humana en la que se encuentra entrampada la sociedad moderna. Los viejos métodos, hoy se camuflan, incluso pareciera que en la actualidad existe una suerte de "hipócrita dictablanda", discursivamente democrática, y en la práctica asesina de sueños y de la esperanza. Evidentemente no estamos haciendo referencia a la esperanza burguesa, con toda su gula, hablamos del "Derecho de vivir en paz".
Ha sido cuento sabido, que han existido, y existirán, políticos al servicio de los intereses del gran capital, y son ellos mismos quienes aplican los métodos de exterminio a todo el que se plante a construir alternativas a su imagen de mundo, siempre egoísta y competitiva. Como dice Galeano en las Venas Abiertas de América Latina (1970), En América Latina resulta más higiénico y eficaz matar a los guerrilleros en los úteros que en las sierras o en las calles (p. 6), el nuevo método implica el desmantelamiento de la memoria, la desaparición de los referentes de lucha, la disolución de la simbología rebelde y constructiva, por ello, desaparecer todo vestigio contrahegemónico se convierte en una labor fundamental de la canalla. Dejar sin identidad a los pueblos, despojarlo de sus referentes de lucha, es ahora un elemento clave para hacer "sentido común" de la arremetida neoliberal que está en la agenda de la derecha internacional.
Estamos ante un pánico colectivo, que estimulan los medios de comunicación, un pavor inducido hacia las grandes masas de excluidos, que el mismo sistema ha generado y que, "para salud del colectivo", deben mantenerse en silencio, en su suburbio, en su barriada, quietos allá, para que los de acá, nos hagamos de la vista gorda y hagamos como si todo anduviera bien. Esa idea, que la burguesía ha instalado, de que los vulnerables son una amenaza para los que tienen ciertas necesidades cubiertas, ha sido un lenguaje simbólico bastante útil para desclasar a los pueblos y sumergirlos en una profunda alienación, para de igual manera obtener beneficios a la hora de elegir quién es el salvador de la "democracia".
Estas ideas reproducen a lo extremo al individualismo, para el cual el orden social existente es natural, por tanto la pobreza debe existir, es una realidad inmutable en el tiempo, y quienes la padecen, no sólo deben aceptarla como precepto, sino que tienen prohibido rebelarse para cambiar "tan sagrado" orden de cosas. Por eso y por muchas otras cosas más, la solidaridad le parece un acto extraño a muchos, y para ello, afinando siempre la estrategia de mantener el statu quo, se han diseñado y se diseñan políticas de persecución y violación de los Derechos Humanos por medio de la criminalización de los movimientos sociales, la protesta social, la organización y hasta de la pobreza.
Un caso particular que mucho tiene que ver con la derecha global.
Recientemente, recibimos el 2016 con muchas noticias a escala mundial, sin embargo, hay una que nos parece bien importante reseñar, por sus características de mal ejemplo para América Latina. En ese vaivén desesperanzador para el pueblo explotado latinoamericano, nos encontramos, afortunadamente, con el resurgimiento permanente de los movimientos sociales, quienes se convierten en definitiva en un instrumento democratizador y de construcción de políticas más equitativas en el marco de la disputa por la restauración del neoliberalismo. Y es esto precisamente lo que viene ocurriendo en Jujuy, al norte de la Argentina, en medio de un panorama heredero de la exclusión "Menemista", recompuesto socialmente desde la calle, con permanentes movilizaciones y aglutinando una fuerza social desde el trabajo colectivo, por medio de cooperativas para la auto-construcción y la auto-sustentabilidad de ciudadelas que atienden a los "sin techos" de esa región.
Milagro Sala, es una mujer que forma parte fundamental de la vocería de la Organización Barrial Tupac Amaru, espacio por medio del cual, se vienen consolidando aportes importantes para la edificación de una política incluyente desde el trabajo, la recreación y la producción. En una entrevista que le realizamos en el año 2010, en Cochabamba, Sala nos decía que venían de la calle, espacio en el que el mismo pueblo comenzaba a buscar soluciones a los problemas de salud, alimentación, educación, trabajo, vivienda (…) y que descubrieron que si no se organizaban no podían vivir un poco mejor, en definitiva, se trata de construir una política desde las bases, para la vida, para el buen vivir (…) La necesidad de vivir un poco mejor, los ha invitado a organizarse en función de alcanzar objetivos comunes, en formación permanente, desmitificando la representatividad política, para consolidar, desde la participación popular nuevas lógicas del hecho político.
Como lo decíamos líneas atrás, el 2016 nos llega con la desagradable noticia de que Milgro es detenida por las fuerzas policiales de Jujuy, imputada por el gobierno local por supuesta "instigación a cometer delitos y tumultos en concurso real", al mismo tiempo la dirigente denuncia que los medios se han encargado de censurar las luchas del pueblo: "Hay muchos compañeros que están sufriendo discriminación y hay medios que están tapando esto. Han barrido con todo". Con todo lo ocurrido en la Argentina en la época Macri, incluyendo el atropello hacia Milagro Sala y a toda la organización Barrial Tupac Amaru, se abre una disputa en el plano de la opinión pública, muchas manifestaciones de solidaridad a lo interno del país, sumado a voces de apoyo y defensa a los Derechos Humanos a escala regional.
Por un lado, los sectores más temerosos, por tanto los más reaccionarios, pedían al magistrado Jujeño la no libertad de la dirigente Milagro Sala, mientras que por otro lado organizaciones sociales y políticas preparaban protestas y movilizaciones de calle a fin de lograr la liberación de la dirigente; se desarrolló además, una actividad importante en la que se proyectó la película realizada por Miguel Pereyra "Milagro en Jujuy" (aquí el link para ver la película). Las últimas movilizaciones se han desarrollado por la intención del Gobierno pro-Macri, de negar el reconocimiento de las organizaciones sociales, suprimir todo tipo de conquista y criminalizar toda movida social, cuestión que ha inspirado posturas de dignidad (radicales) en el plano de la organización social de base, en tal sentido algunos dirigentes declararon ante los medios de comunicación que no estarían dispuestos a "regalar 16 años de trabajo y militancia". Sin duda todo esto genera procesos de identificación colectiva con una lucha histórica del pueblo organizado, contra los verdugos de la esperanza.
Como buen verdugo, y como se estila, por parte de las elites políticas, Macri se negó a hablar sobre la detención de Milagro, perdiendo incluso la compostura en la refinada ciudad de Davos, luego de una rueda de prensa, cuando un periodista comparó la mencionada detención con el caso Leopoldo López en Venezuela, saliendo en defensa automática del dirigente Venezolano, quien a su juicio es absolutamente inocente, a pesar de haber estimulado a la violencia de calle, con la fulana "SALIDA", dando cuenta de 43 muertos en todo el país, mientras que Milagro Sala es una terrible instigadora, por participar en una protesta popular (montaron un campamento) en una plaza de la ciudad de Jujuy, lugar en el que además hay que decir, no se ha arrojado ni una piedra. No es el mundo al revés, es el mundo distorsionado por una patología represora que viene haciendo sentido común entre quienes pretenden restaurar el neoliberalismo y la opresión hacia el pueblo excluido.
Sin duda alguna a Milagro Sala le han montado un prontuario policial, "estilacho" de la vieja escuela que propicia el terrorismo de Estado, incluso, viejos rencores se avivan, por ejemplo el de Gerardo Morales gobernador de la provincia de Jujuy, quien ha recibido escraches a granel, huevos y basura le ha caído del cielo, culpando a Sala de "todas sus desgracias". Fernando "Nando" Acosta, vocero fundador de la Tupac afirma que: "Con Milagro se ensañaron, por lo que representa, y le inventaron lo del tumulto y la instigación. Ahora resulta que reclamar es extorsionar, y organizarse es asociarse ilícitamente. Así deberíamos estar todos presos", ironiza.
Lo que no podemos hacer, es pecar por inocentes, pues estamos ante una arremetida internacional en contra, no sólo del pensamiento crítico, sino fundamentalmente en contra de la posibilidad de consolidar una alternativa política construida desde los movimientos populares. La democracia participativa se ha erigido como un estorbo para los intereses del gran capital, por ello, criminalizar la protesta social se convierte en una urgencia para quienes pretenden instalar el "gorilismo del mercado".
Un aspecto que no podemos dejar de lado, es la importancia de la movilización social, porque como bien afirman distintos movimientos sociales: "la calle, nos da rostro, nos da nombre, nos da voz", ahí se desenvuelven nuestras luchas por la vida, por la justicia, por la construcción de otro mundo. Es en la movilización el espacio en el que se trabaja la conciencia, la memoria histórica de los pueblos, la construcción colectiva, por ello decimos que el pueblo revolucionario siempre estará en la calle.
Independientemente, de las miles de cosas que aún quedan y quedarán por debatir, organizaciones sociales como la O. B. Tupac Amaru, ha logrado construir nuevas subjetividades desde lo organizativo, trabajando urbanismos desde la autoconstrucción, con espacios para la atención de los niños y niñas, lugares de rehabilitación, asistencia médica preventiva, odontología, escuelas, piscinas, organización para el trabajo emancipador, parques y miles de cosas más, dando cuenta de la fuerza-potencia que tienen los pueblos organizados cuando se deciden a consolidar espacios para la vida.
En el mundo asquerosamente atemorizado, individualista al extremo, que pinta la burguesía, encontrarnos y edificar nuevas concepciones desde la participación popular, se convierte en un acto subversivo, el cual perseguirán y buscarán sepultar los esbirros de la ignominia. La memoria de la resistencia está encendida, en medio de posibilidades reales de dejar atrás definitivamente las aspiraciones burguesas de retornar a un mundo alienado, alienante y convertido en una especie de infierno, que le rinde culto a la muerte.
La esperanza de ser, lo que el potencial de amar nos brinda como posibilidad, es una realidad en éste tiempo, y esta labor requiere de movilización, conciencia, memoria y organización. De esa forma, siempre VENCEREMOS!!
Otras referencias de prensa, para conocer más del tema:
http://www.clarin.com/politica/Milagro-Sala-volvieron-excarcelacion-ofrecieron_0_1513648948.html
http://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/1-291480-2016-01-31.html
http://www.tupacamaru.org.ar/2016/01/29/2453/comunicado-de-la-tupac-amaru-ante-la-nueva-detencion-de-milagro-sala