jueves, 20 de septiembre de 2018

A la “comuna o nada”, le falta una letra y mucha voluntad.


Por: Carlos Rivas*.


Entre muchas otras cosas, a la idea de "comuna o nada" le falta una letra importantísima, y no es un asunto meramente nominal, de consigna, hay que hacer un análisis estructural, que incida en la arquitectónica que le da sostenibilidad al sistema capitalista, para desde los bordes superar esa tendencia a acabar con la vida. La batalla por la revolución, no se trata únicamente de luchar para ser incluido en el sistema de mercado, tener acceso al sistema tal cual lo concibe la lógica burguesa, es plantarse y hacer las cosas radicalmente diferente, un modo de vida distinto, unas relaciones sociales y de producción que difieran de las formas naturalizadas por quienes ven en la oportunidad para hacer dinero a costa de la necesidad de las mayorías un hecho normal, cuando en realidad es una abominación producida y reproducida en el hecho social inmerso dentro de la dinámica propia del capitalismo.

Hacer una "revolución" para que se reproduzcan las formas de dominación, es estar destinado a fenecer ante la voracidad de un sistema que no respeta la vida. Es patinar en yogur, es hacer el ejercicio del perro que va dando vueltas detrás de su cola. Si el Poder popular está pensando en hacer un esfuerzo por incluirse en el mercado capitalista, con todo lo que su metabolismo representa, quizá empuje hacia el escalamiento social de algún grupo minoritario, dejando al mismo tiempo por fuera a una gran mayoría, los excluidos de siempre, dejando claro a la larga, que no se cambiará nada. Pero el asunto es complejo, y para un combate real por la construcción de otro modelo económico y societal, las acciones deben estar coordinadas para asestar golpes contundentes, desde afuera, desde los bordes y desde adentro. Se trata entonces de la producción material y subjetiva de unas nuevas relaciones, en ese sentido estamos ante la necesidad de producir sin hacer fetiche de la mercancía, producir para atender a las necesidades del pueblo, producir no para la ganancia o la multiplicación del capital, producir para impulsar procesos organizativos populares, producir para que no haya explotación, en definitiva se trata de construir una nueva Lógica del trabajo para la generación de la riqueza y el bienestar social.

Cuando el comandante Chávez lanzó la idea de comuna o nada y al mismo tiempo, acompañado de dicha idea, planteó la ley orgánica del sistema económico comunal, tenía claro el horizonte de construcción de un nuevo modelo económico, empujado desde abajo, con un nuevo espíritu, un modelo económico que se abriría espacios entre una infraestructura que está al servicio de la desigualdad, para que agrietando estas brechas, pudiera construir lo nuevo, pudiera construir lo diferente. Y todo este esfuerzo, desde los adentros y desde los bordes, juntarlo con los afueras, con experiencias que no tienen ningún vínculo con el adentro del mercado, pero que en definitiva se cruzan en la necesidad de encontrarse en un espacio para el intercambio, no sólo intercambio de mercancías, también de experiencias organizativas y de solidaridades.

Ocurren cosas como éstas en las comunas que producen, en las organizaciones sociales antisistémicas que empujan la autosustentabilidad para avanzar en la construcción de emancipación, ocurre en los comités de prosumidores (concepto que en unifica la idea de productor-consumidor), ocurre en los lugares y las mentes donde está germinando la idea de la superación del rentismo como forma de producción dominante y degradante de la sociedad venezolana. En contraposición, es clave la afirmación de que el capitalismo no produce, a éste le importa la ganancia, exprimir dinero, y si esto se logra produciendo menos, contratando menos mano de obra, mejor. Lo que ocurre en la actualidad con los llamados "puntos de venta", son el mejor ejemplo de ello, una cantidad de individuos que tienen acceso a la tecnología, muchos de estos comerciantes no producen nada, alquilan el instrumento tecnológico y, sin trabajar, aumentan sus márgenes de ganancias.

Pareciera que es normal (o normalizado), que se reproduzca un modelo societal parasitario, a costa del Estado y hasta con la aparente autonomía de lo privado. Mientras todo eso ocurre, es necesario la emergencia de nuevos actores en el hecho productivo, y el terreno fértil para ello es la comuna como herramienta para que el pueblo pueda rediseñar sus formas de vida. Parte de esta discusión y construcción están en marcha, en diferentes espacios, en distintos territorios. En nuestro caso, desde la casa del costurero de los sueños emancipatorios Eulogio Paredes, tratamos de construir comuna, y de la misma forma impulsamos espacios para la producción, hacemos un esfuerzo colectivo por dinamizar éste debate. En éste espacio, ubicado en un sector popular de la ciudad de Mérida, nos organizamos, para hacer sopas, pan y arepas de harina de trigo. Entonces conformamos una
Empresa de producción social (EPS), la cual denominamos "EPS Pan Pal Pueblo". Para nosotros esta empresa no es un fin en sí misma, es una herramienta para seguir impulsando procesos sociales, que den cuenta de nuevos espacios para sostenibilidad en el tiempo del proyecto emancipatorio del pueblo organizado.

Tenemos clara la idea, de que lo que hacemos no tiene por objeto competir en el mercado capitalista, nuestro fin no es la ganancia o el lucro, trabajamos para producir bienestar social, producimos solidaridades, construimos poder popular en el marco de una nueva territorialidad, que atiende necesidades específicas de la población más vulnerable, por tanto, para que todos esos planteamientos sigan creciendo se necesita reinversión social, y para que esto ocurra, parte de la carpintería está en afinar lo operativamente práctico del hecho económico. Sabemos que todo actor que pretenda participar del hecho económico necesita estar autorizado por medio de lo que conocemos como el Registro Único de Información Fiscal (RIF), requisito indispensable para cumplir con obligaciones tributarias, y para cualquier otro trámite en la administración pública. De esta manera, para personas nacionales, antecede a la codificación numérica la letra "V", para extranjeros la letra "E", para itinerantes extranjeros la letra "P" de pasaporte, la letra "J" para persona Jurídica, y la "G" para los entes gubernamentales. Luego del 25 de Mayo del 2015, el presidente de la república ordenó al SENIAT, identificar a las comunas y consejos comunales con la letra "C", las cuales antes se venían registrando con la letra "J", y que tenía por objeto evitar: que las comunas y los consejos comunales sean considerados dentro del sistema fiscal venezolano como privados.

Con relación a esto último (y aquí viene el debate por la letra faltante, que describimos en el título de esta nota), aunque se giraron instrucciones para su "ejecución inmediata", en el año 2015, faltó el engranaje con la infraestructura institucional que le da cuerpo al sistema económico venezolano. Un ejemplo de ello radica en la banca. En el año 2018, a más de tres años de haber emitido la orden presidencial, es imposible hacer una simple transferencia de una banco privado a una cuenta de una EPS, que se identifique en su RIF con la letra "C", ya que sus plataformas tecnológicas no han modificado o habilitado dicha letra para que se puedan incorporar experiencias productivas populares a las plataformas de la banca privada. De esta forma ocurre que, la gente se organiza, produce, hace los trámites para formalizar su proceso productivo, se le asigna el RIF correspondiente con la letra "C", abre su cuenta en el Banco Bicentenario, pero nadie le puede transferir, en consecuencia se estancan los procesos en marcha, quiebra la EPS, se desmantela la organización, y muere la posibilidad de la emergencia de un nuevo espíritu societal. A la idea de la construcción de la comuna, le falta la incorporación de la letra "C". La "C", debe aparecer en toda la arquitectónica institucional, para poder apalancar los procesos de transformación, de otra manera estaremos legitimando la ideología del liberalismo, que da cuenta de que lo único posible está en la esfera de lo privado. Esto de la letra, en realidad, es lo más simple de resolver, lo más difícil es actuar con voluntad para comprender que en la idea lanzada por Chávez de "Comuna o Nada", radica la posibilidad de verdaderamente hacer la Revolución.


* Vocero de la casa del costurero de los sueños emancipatorios Eulogio Paredes. Comuna Bicentenario 16 de Septiembre. Contacto: carlos_rivas_45@hotmail.com


martes, 18 de septiembre de 2018

Tabay es historia y también poesía.


Por: Carlos Rivasi


Que cosas con éste pueblo, hoy nuevamente tiene la oportunidad de re-pensarse, de mirar a sus adentros con el caleidoscopio de la historia, esa misma que habitamos en nuestra cotidianidad, esa que está viva que pertenece al pasado y al mismo tiempo al presente.

Un momento tan importante como éste, amerita un esfuerzo extraordinario, para pintar las palabras, hacerlas poesía y rememorar nuestro propio proceso, para reflexionar sobre lo que ha sido nuestra historia, y cómo nosotros, pueblo protagonista nos vemos reflejados en un proceso social que está en construcción permanente. Si lanzamos la pregunta al vuelo del papagayo de ¿Cuánto tiempo ha pasado por éste territorio? Tendríamos que entender primero ¿Qué es un territorio?

Para Trino Borges un territorio es un pedazo de tierra delimitado. Con una cultura y unas tradiciones que si se cultivan permanecen en el tiempo. Matilde Briceño afirma por su parte que un territorio es un pedacito de cielo, que amamos, pero que no tiene dueño. Como siempre, las cosas más hermosas del mundo, no tienen dueño, y al mismo tiempo nos pertenecen a todos. De esta forma los territorios son construidos con la vida cotidiana, sobre dichos espacios reflexionamos y actuamos permanentemente, sobre ellos transcurre la vida. Cómo no valorar la importancia de un territorio, si sobre él, ocurre y transcurre el amor.

En estás letras juntas hablaremos del territorio y de la identidad del tabayense con su entorno. Haremos un recorrido por tres momentos históricos, pasearemos por la colonia, con sus diferentes visiones, luego observaremos los testimonios de dos patrimonios de éste municipio, el señor Juan Peñaloza de 90 años, y la señora América Moreno de 96 años, para cerrar con el relato de Andrés Becerra, un joven de 16 años, visión más próxima de lo que representa ese largo recorrido histórico.

La gente que hoy conforma este pueblo estaba diseminada por todo el territorio, hacía uso de él como su pedacito de cielo, las lomas y las riveras de los ríos componían un espacio, que al mismo tiempo producía una identidad que unificaba un criterio étnico. Un pueblo que hacía uso del espacio, para el intercambio, para la vida. Desde la colonia, el europeo reconocía a éste espacio como un territorio benevolente para la vida, en un documento del siglo XVII encontramos lo siguiente, textualmente transcribimos:

proveido que se les notifico y que todos conforman y señan por el mejor y más acomodado sitio para la población y agregación de todos, el que esta junto a las tapias biejas que solia ser la yglesia donde su merced estuvo con los dichos españoles e yndios y que todas las dichas tierras de tabay son muchas buenas y muy fertiles para las labranzas de todos los dichos yndios y que tienen agua y leña y vuen temple sano y algo fresco y que tiene todas las comodidades que son menester y se requieren para una vuena población y que esta distante de la ciudad de Merida como dos leguas (…)ii


Como un lugar idóneo para el asentamiento y el hábitat, era reconocido ya por nuestros antepasados aborígenes, confirmación que luego se consolida con el señalamiento que encontramos en éste documento, sin embargo habían diferentes visiones en cuanto al uso del espacio geográfico. Según la concepción colonial, era menester concentrar demográficamente a la población nativa, en lo que posteriormente vamos a conocer como los repartos, para que no quedaran nuestros indígenas derramados en los montes ni en partes ocultas donde tengan ocasión de ydolatrar y usar de otros bicios(…) para que mejor se le pueda enseñar la doctrina Christiana y sean curados en sus enfermedadesiii. Como sabemos la historia, no es reflejo de lo que exactamente pasó, al contrario, es una representación del pasado, cargada de subjetividad, y éste es el mejor ejemplo para comprender que desde la llega del europeo hasta nuestros días se tratan de dos proyectos distintos, dos maneras disimiles de hacer uso del espacio, dos puntos de vista que chocan y se encuentran al mismo tiempo en cuanto a la construcción de una territorialidad en permanente construcción.

Los originarios aprovechando al máximo su espacio territorial, haciendo uso óptimo de los recursos naturales, para PODER garantizar la vida. En su contra parte encontramos a un proyecto europeo de control de los cuerpo y de la sociedad, con fines políticos para el ejercicio del PODER sobre el territorio, dos concepciones que ocurren dentro de un mismo espacio geográfico. En el Mismo Documento, citado anteriormente, Alonso Vazquez de Cisneros, recomendaba en su visita de 1619 que: para que dicha población tenga efecto todos los dichos yndios (…) sean sacados de sus asientos y poblaciones biejas y otras partes de donde estén apartados y todos sean reducidos y agregados a la dicha nueva población de Tabay y se le quemen quiten y demuelan sus bohios y ranchos antiguosiv. Concentrar para controlar, empobrecer para dominar, quemar y demoler la obra de su cultura, para eliminar la identidad con una territorialidad, que por medio del uso libre del espacio, se hacía incontrolable para las aspiraciones de de dominación colonial. Éste último no representaba otra cosa que un proyecto político de dominación y control, que encontraba para el momento la justificación de que a causa de dicha dispersión poblacional ocurrían situaciones que en última instancia perjudicaba a la población aborigen. Cisneros, en ese sentido aseguraba que: por estar dividida sin forma de pueblo y con la falta de la doctrina se mueren muchos y sin bautismov. Nuevos pensadores, como el caso de José Gregorio Araujo, en Tabay: Poblado, gente y costumbres desde su historia (2012; p. 90), define esta acción como un trágico proceso de desarticulación económica, social y religiosa, donde todas sus creencias y formas de vida, fueron sustituidas por las impuestas por los colonos quienes, en un primer momento, buscaban minas de metales preciososvi. Para el europeo, más que la Fe cristiana, ordenar al territorio para garantizar el éxito del proyecto colonial era lo importante, el pueblo a través del tiempo re-significó la nueva territorialidad, dando paso a una Fe que se vincula con la fiesta y la tierra, para tener siempre motivos de celebración en éste reino terrenal.

Y así desde aquel 29 de Agosto de 1619, viene la gente que comprende toda esta área geográfica construyendo a Tabay. Juan Antonio Peñalozavii, de 90 años, tabayense de pura sepa, como él mismo se reconoce, nacido en 1928, proveniente de la Loma del Pueblo, trabajador del poder judicial, corista por 26 años en la iglesia del pueblo, cuando los oficios religiosos eran en latín, nos brinda un testimonio importante, en primer lugar cuando se reconoce como parte del territorio circundante, que nutre al mismo tiempo la construcción del pueblo de Tabay. Para el Señor Juan Peñaloza, Tabay está compuesto de gente Humilde, pacífica, trabajadora, laboriosa de la tierra, proveniente de raíces indígenas, en otrora maltratada por los españoles, que celebra al trabajo, ejemplo de ello, lo vemos cuando se vuelca con fervor a las calles en las fiestas de San Isidro en el mes de Mayo, y luego se queda a compartir en la plaza, tanto en los días festivos como luego de las homilías de los Domingos. Por cierto una plaza, que sirve como espacio público y que hasta 1942 no tenía ningún árbol, pues en ese año fueron sembrados como ornamento de la misma, al rededor de 300 pinos. Ocho años transcurrieron, hasta que en 1950 se instaló en dicha plaza un busto al Libertador Simón Bolívar. En palabras del Señor Peñaloza, Tabay es un pueblo que ha surgido muy despacio, y que aunque en una ocasión tuvo que irse del pueblo, vivir fuera de él, pues se fue cumplir labores religiosas con el Padre Hector Monsalve en el año 1951, se siente orgulloso de ser de Tabay, porque siempre hablan bien de Tabay, y porque toda su familia aquí vive.

Buscamos también a Doña América Moreno Parraviii, quien representa un patrimonio vivo de Tabay, al igual que Don Peñaloza. Nacida en 1922, con 96 años de edad, Doña América, proveniente del pueblo de San Juan Bautista. Afirma que a Tabay lo conformó gente muy pobre y humilde, un pueblo, según sus propias palabras, donde todos éramos iguales. Doña América fue partera, recibió a la vida, atendió a muchas madres de éste pueblo, le dio la bienvenida a muchos hijos de estas tierras. Proveniente de San Juan Bautista, se reconoce como tabayense, y afirma además, que adora éste lugar porque es la tierra de ella, y que se siente orgullosa de ser de Tabay, porque así lo quiso Dios.

Ya más cercano a nuestro tiempo, quisimos indagar en la identidad de un joven. Entrevistamos de esta forma a Andrés Alejandro Becerra Castilloix, de 16 años de edad, para él Tabay está compuesto por gente muy tradicionalista, conservadora, por familias muy unidas que siempre piensan es sus madres, gente que le gusta el trabajo, que disfruta de las tradiciones, es un pueblo profundamente católico. Ya sabemos que Don Juan y Doña América, nunca se fueron de estas tierras, y por cuestiones de contexto le preguntamos al Joven Andrés lo mismo: ¿Te irías de Tabay? A lo que respondió de inmediato: No, no me iría, me gusta Tabay, es un sitio muy bonito, muy tranquilo, me gustaría tener aquí a mi familia, aquí está toda mi familia, Tabay es la casa mía. Andrés con sus 16 años de edad, nos recomienda a todos, prácticamente lo que han hecho a lo largo de su vida Don Juan y Doña América, trabajar por su pueblo. Tres visiones, de tres momentos históricos diferentes, cada uno en su contexto, todas reconociendo lo hermoso del territorio donde hoy transcurre éste poema, que se escribe y se escribirá y que lleva por título, Tabay.

¿Cuánta agua ha pasado por la quebrada la Leona, cuántos sueños, nutrientes y vida han pasado por las riveras del Chama, cuántos productos han bajado de las lomas aledañas para alimentar al pueblo, cuántos labriegos han cosechado esperanza, cuántas manos se han metido en la tierra para hacer historia, cuántas parteras han recibido hijos de estas tierras, cuántos bebedizos han curado malestares del alma. Cuántos días impregnados de ternura nos quedan por vivir en estos territorios?

Por todo ello, ¿Puede Tabay ser lo que es, de forma aislada, sin mirar a su entorno espacial, sin reconocerse como parte de una territorialidad que la integra, que la compone? La historia de corta mirada dirá que sí, la historia que no siente con pasión lo que siente un tabayense, será reduccionista. A nosotros nos queda convertir la palabra en cánticos que enamoren a la población de todas la edades, para que hagamos de Tabay el lienzo en el que podamos pintar nuestra más bella obra.

Martí dijo en sus discursos en Estados Unidos (1890) que las palabras deshonran cuando no llevan detrás un corazón limpio y entero. Las palabras están de más, cuando no fundan, cuando no esclarecen, cuando no atraen, cuando no añaden... Nos esperan muchos años más de reflexión, nos espera, a la vuelta de la esquina una identidad por construir, para que el futuro esté compuesto cada vez más de una vida digna. Es Bonito vivir en Tabay. Vale la pena quedarse en Tabay.

Muchas gracias.

NOTAS:


i Discurso pronunciado en el marco de la celebración del 399 aniversario de la población de Tabay, el 29 de agosto del 2018.

iiBiblioteca Nacional Biblioteca Tulio Febres Cordero. Rollo. 18-19. P. 137/F. 564.

iiiBNBTFC. R. 18-19. P. 137/F. 564.

ivBNBTFC. R. 18-19. P. 139/F. 566.

vBNBTFC. R. 18-19. P. 148/F. 570.

viEl texto, Tabay: Poblado, gente y costumbres desde su historia es una compilación de varios autores quienes dan miradas diferentes de los que ha sido el proceso histórico de la conformación de Tabay. Editado por la Alcaldía del Municipio Santos Marquina, el Archivo General del Estado Mérida y FUNDECEM, Maridé-2012.

viiLa entrevista realizada al Señor Juan Peñaloza, fue desarrollada el día Viernes 24 de Agosto del año 2018, en horas de la mañana en su vivienda-Tabay, Edo. Mérida.

viiiLa entrevista realizada a la Señora América Moreno, fue desarrollada el día Viernes 24 de Agosto del año 2018, en horas de la mañana en su vivienda-Tabay, Edo. Mérida.

ixLa entrevista realizada a Andrés Becerra, fue desarrollada el día Viernes 24 de Agosto del año 2018, en horas de la mañana en su vivienda-Tabay, Edo. Mérida.


viernes, 25 de mayo de 2018

Materiales de la Casa del Costurero

Saludos, por acá enviamos algunos materiales para el debate y la difusión del trabajo que venimos realizando en la casa del costurero de los sueños emancipatorios "Eulogio Paredes", un espacio para la construcción de alternativas antisistémicas, que sirvan de apoyo a los procesos de liberación popular... si desean contactarnos pueden hacerlo por medio del carlos_rivas_45@hotmail.com o por el 04267269308.





En la parroquia Domingo Peña de la ciudad de Mérida, una casa recuperada con el trabajo de la comunidad se convierte en símbolo de las luchas populares por la transformación de la sociedad venezolana. La Casa del Costurero de los sueños emancipatorios "Eulogio Paredes" es espacio para la organización y el desarrollo del barrio Santa Elena.

https://www.youtube.com/watch?v=Y4ongAxKv78





Trabajo realizado por los miembros del taller en producción de cine. El costurero in-surge como un espacio para la consolidación de los autogobiernos locales y la profundización de la revolución Bolivariana... desde Santa Elena para el Mundo...

https://www.youtube.com/watch?v=Rta_30fkVWo



Después de más de tres años de ardua lucha colectiva por la recuperación de la Casa del Costurero Eulogio Paredes, espacio vital de encuentro, debate y tejido social en Mérida, se inaugura la biblioteca comunitaria para la emancipación popular "Trino Borges", quien como historiador comprometido con la pedagogía popular, ha sido el principal colaborador de esta iniciativa. Orgulloso por el pequeño homenaje que le hemos rendido al darle su nombre a esta biblioteca, en grato conversatorio destacó la vital importancia de la lectura colectiva en nuestra sociedad, resaltando el deber de amar a los libros, pues no son cualquier objeto, sino uno muy particular, que según el comandante Fidel constituyen parte de los bienes espirituales de la humanidad.

https://www.youtube.com/watch?v=bGaf8MftO-c






Primera producción de pan:

https://www.youtube.com/watch?v=Q7FwljJG7tU





Santa Elena, Mérida Venezuela, está la casa del costurero, una experiencia comunal donde se produce una nueva subjetividad, además se hace pan y arepas de harina de trigo, aquí les dejamos un humilde documental hecho a pulso y con mucho cariño, que se difunda por la patria grande y sirva de herramienta para el fortalecimiento de la conciencia popular transformadora:

https://www.youtube.com/watch?v=uqxxcxs32OA




Nuestro Blog: http://epccasadelcosturero.blogspot.com/




viernes, 18 de mayo de 2018

NUESTRO COMPROMISO ES CON LA LIBERACIÓN.

Distintos procesos están ocurriendo en el seno del poder popular, desde lo organizativo, desde lo creador, la gente en Venezuela construye alternativas emancipatorias, lo interesante de todo esto es obeservar, cómo desde lo pequeño se viene construyendo otro mundo, o mejor dicho un mundo en el que quepan todos los mundos posibles, una democracia del mercado, cuando ponemos a éste último al servicio de la gente y no al revés, una democracia popular, cuando la gente se asume protagonista de su propio proceso proceso organizativo. La Liberación en marcha, no el libre mercado propugnado por una élite que no supo dar respuestas a las demandas históricas de las mayorías. 

En esta entrega presentamos el Documental: PAN PAL PUEBLO, DE LA CASA DEL COSTURERO. una experiencia de verdad, que se perfila como un referente en el Estado Mérida, y que nos brinda la posibilidad de reflexionar sobre los procesos que la gente viene construyendo en períodos de crisis. 


para ver el Documental pinche el siguiente Link: 


https://www.youtube.com/watch?v=uqxxcxs32OA&feature=youtu.be




esperamos que sirva para la reflexión y el debate.

lunes, 5 de marzo de 2018

EN LA CASA DEL COSTURERO HOMENAJEARÁN A LAS MUJERES EL 9 DE MARZO



Este viernes 9 de marzo de 2018, a partir de las 7:30 pm se celebrará el Día de la Mujer, en la Casa del Costurero, frente a la plaza de Santa Elena de Mérida, con cantos, danzas y performances, haciendo un sincero reconocimiento a las féminas de toda Venezuela, por sostener con amor al mundo, aportando cualidades positivas, practicando diversos oficios, profesiones y ocupaciones.
La Casa del Costurero es un espacio comunitario y multicultural, desde donde se promueve la participación en entornos educativos, formativos y didácticos, lúdicos, artísticos y laborales, atravesados por una lógica humanista, de verdadera resistencia. Es por ello que un conglomerado de personas y colectivos honrarán así a las madres, hijas y hermanas de todos, enmarcados en la dignificación de ser mujer.
En este sentido, representarán el ámbito de la danza: Lisbeida Rangel, Andry Rangel, Laudis Rangel y Marjorie Guevara; se presentarán las cantoras: Ángela Linares, Negra Cerón, Dafne Uzcátegui, Rebeca Guerrero, y Lheorana González; con los músicos: Ana Ana Maria Petrella, Pedro Vargas, Jorge Chacín, Xavier Rodríguez y Roque Duarte. Recitarán poesía: Yuri Patiño, Karelyn Buenaño y Ana Petrella. De igual modo, la artista plástica Steffany Delgado expondrá algunas de sus obras; así como las fotografías de José Félix Meléndez, Gabriel Medina y Gerónimo Tepedino.
Cabe acotar que este espacio lleva el nombre de La Casa del Costurero de los Sueños Emancipatorios “Eulogio Paredes”, haciendo honor a las raíces de este espacio, que durante muchos años albergó a distintos grupos de hombres y mujeres, que se dedicaban a la manufactura de textiles.
Este evento se realiza bajo la producción de Yuri Patiño, Carolina Girón, Ángela Linares, Kristy Morales, Rosiris Berroterán, Ever Delgado y Xavier Rodriguez.


lunes, 5 de febrero de 2018

Chavismo en Dolor Mayor. Es tiempo del avance popular.


Por: Carlos Rivas.


Que fácil es, en estos tiempos, darle una patada a la mesa. Abandonar todos los sueños a causa de la situación realmente existente, que estamos padeciendo todos los ciudadanos de esta patria. Ahora es hasta cómodo señalar los errores de la "dirigencia", que han sido varios además. Escurrir el bulto como dicen en el argot popular. Lo cierto es, que bastante hay que decir sobre lo que en la actualidad vive nuestro pueblo, pero lo más importante es que hay mucho por hacer, y en ese HACER, debe privar la idea de liberación definitiva de nuestro pueblo. Con todo esto, podríamos afirmar, sin temor a equivocarnos, que el proyecto político más hermoso que ha construido la sociedad venezolana a lo largo de su historia ha sido el de la Revolución Bolivariana.

La Revolución se ha planteado a lo largo del tiempo, como una posibilidad, como una suma de voluntades que permitan transformar una realidad determinada, una realidad que no da cuenta de los intereses y las necesidades del pueblo. Es abrir las posibilidades de construcción de un proyecto histórico que esté a la altura de los clamores del pueblo, de sus aspiraciones colectivas, que nos permita reproducir la vida con dignidad, que nos haga dueños de nuestra fuerza de trabajo y que con nuestro actuar podamos consolidar una ética liberadora. Son esas las cosas que se vienen discutiendo desde el movimiento popular, desde las comunas, las cuales agrupadas en espacios organizativos crean y re-crean una nueva subjetividad desde el trabajo, desde el vínculo social, desde la posibilidad de la vida.

El proyecto político de la revolución Bolivariana logró durante la primera década 2000-2010, reducir la brecha entre ricos y pobres, cuestión que se ha vuelto a abrir de manera exacerbada, pues para nosotros los pobres, la realidad nos pinta un panorama de imposibilidades, mientras que para la clase dominante el derroche y la abundancia forma parte de un proceso de acumulación que se ha aparejado con una práctica delincuencial, que le genera jugosos dividendos. Es decir, de la crisis de los pobres, genero lucro para mis intereses particulares. Con esto evidenciamos, que la crisis es para los desposeídos de siempre, incluyendo a la mal llamada clase media, mientras que el gansterismo económico sigue arrojando ganancias exorbitantes que van a parar a los bolsillos de quienes hablan del país con la boca llena de comida.

Bastantes logros ha alcanzado la Revolución Bolivariana en su corta historia, y al mismo tiempo ha sufrido muchos retrocesos que el pueblo lamenta. En Junio del 2015, Venezuela recibía un reconocimiento por parte de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), producto de su empeño y de su lucha en contra del hambre, un reconocimiento internacional, que resonó en el mundo capitalista, y por su "mal" ejemplo, desde el poder mundial había que silenciar a escala global todos los avances que desde la patria de Bolívar se venían consolidando. Para ese entonces Venezuela se encontraba entre los 29 países, que para el momento habían alcanzado el cumplimiento de varias de las metas del milenio, lo que significaba un avance importante. Sólo dos años después, la misma FAO, alertaba sobre la crisis alimentaria en el país, representando una regresión histórica, a sabiendas de la manipulación mediática que ha existido sobre el tema, lo cierto es que los indicadores actuales muestran en definitiva otra realidad, en comparación con años anteriores. En ese sentido, No es que los premios de la FAO sean de extrema importancia para nuestra revolución, el asunto es que la realidad nos está diciendo que debemos prender las alarmas, porque nuestro pueblo está hoy en día más vulnerable que nunca, y eso es una realidad innegable, en consecuencia, debemos actuar con contundencia para que la revolución cumpla con su ontología, es decir su papel histórico.

Basta con andar por las calles, con hablar con la gente. El lamento es diario, el dolor mayor se traduce en indignación, y la revolución es la única capaz de sentir éste dolor, de transformar esta realidad. Con políticas públicas que demuestren protección para el avance emancipador, podemos restablecer la esperanza.


El Horizonte es por la dignidad y la rebeldía popular siempre en revolución.

Nuestra revolución, hoy más que nunca debe convertirse en referente moral, debe ser consecuente con sus principios, con nuestro pueblo, incluso con los que aun siendo de nuestra misma clase social, nos "adversan" políticamente. Lo único que tenemos, los revolucionarios, los explotados, los de abajo, es nuestra fuerza de trabajo y la moral, y de esta última depende la posibilidad de mantenernos vivos políticamente. Si nos dejamos arrebatar estos dos elementos estamos perdidos, y cuando hago esta afirmación, estamos ante la muerte de la esperanza en el seno del pueblo, seguidamente viene la despolitización, y ¡Zas! La Burguesía renace con todo su aparataje simbólico, y armamentístico, a hacer tabula rasa, es decir, a desaparecer de la historia las aspiraciones históricas del pueblo.

En éste escenario hay muchos ridículos y absurdos sociales, como el hecho de que muera un niño por falta de algún medicamento, o escuchar a la burguesía trapera hablar del hambre del pueblo. Estos últimos, culpables del desplazamiento de las grandes mayorías, negadores de la vida y la dignidad. Por tanto la Revolución Bolivariana, debe hacer un profundo acto pedagógico de la mano con nuestro pueblo. Predicar con la práctica.

En un texto titulado Fidel y la Religión del teólogo Brasileño Frei Betto (2006), este afirma:


(...)No pienso que nos deba inquietar tanto como la idolatría vigente en varias expresiones de fe que nada tienen que ver con el Dios anunciado y encarnado por Jesús, como es el caso de los que profesan el nombre de Dios en defensa del capital, del colonialismo, de la discriminación social y racial, de la represión contra los trabajadores. Y no es al nivel de las verdades de fe donde se debe establecer el diálogo entre cristianos y marxistas, sino al nivel de la práctica liberadora, de las exigencias de justicia, del servicio desinteresado a la vida de la colectividad. Ese es el nivel del amor, criterio fundamental de nuestra realización humana y de nuestra salvación (...) Es en la práctica liberadora donde se dará la separación entre los que, en nombre de Dios, luchan por el proyecto de la vida y los que se inscriben en el partido de la muerte. Esa misma práctica acerca a los cristianos y a los ateos comprometidos con la construcción de una sociedad fraterna, donde los bienes de la vida sean igualmente repartidos (P. 62).


Así, la práctica debe ser consecuente con el discurso, de otra manera estaremos reproduciendo una psicosis colectiva, donde la incongruencia marca la opinión pública, se pierde la credibilidad y la moral desaparece entre quienes predican una idea y actúan a la inversa. Esto último es lo que ocurre con relación a la distribución de alimentos por medio de los CLAP's, pues los mismos son adquiridos por las comunidades, cuando tienen suerte, cada 4 meses, incluso algo peor, ahora son distribuidos por las UBCH's, haciendo selectivas las entregas de los mismos en las comunidades populares, es decir, sólo a los "Chavistas". Craso error, pues una Revolución se plantea para atender a todo su pueblo, se debe a su pueblo, o en últimas circunstancia debe ser responsable con los débiles y desposeídos. Uno pudiera preguntarse, ¿qué culpa tienen los niños, que viven en el seno familiar de una parranda de "escuálidos recalcitrantes" de un sector popular? ¿Quienes son los elegidos para negarle el pan al hambriento?

En consecuencia, Uno de los aportes más extraordinarios del proceso revolucionario, es haber abierto la posibilidad de consolidar un sujeto histórico con conciencia de clase, es decir, esta voluntad colectiva, con su empuje nos metió en la lucha por la historia y el porvenir. Lo contradictorio está en las concepciones que sobre estos asuntos asume una dirigencia retrógrada, que cree que el pueblo es un rebaño de ovejas receptora de lineamientos, negándole la posibilidad de asumirse como sujeto histórico, con discernimiento y capacidad para consolidar el autogobierno, concepto manejado por el comandante Chávez, temido por esas estructuras caducas que propician, con sus prácticas decadentes, el retroceso del movimiento popular.

Aquellos dirigentes populares que caminaban por sus barrios con cabeza en alto, a razón de que por su trabajo organizativo les conseguían el alimento a toda su comunidad, hoy andan a hurtadillas, por sus sectores populares, señalados por sus vecinos, viendo morir la moral de lo que había sido una dirigencia emergente, la cual tenía contacto directo con el pueblo. Esos "lineamientos" perversos y pervertidos, delineados por una dirigencia que no le da la cara diariamente a la gente, son los responsables de la muerte de la moral Chavista. En ese sentido, es bien sabido, que la distribución de alimentos por medio de las UBCH's ha sido un error garrafal, pues estamos dando muy mal ejemplo, y eso le pesa a la dirigencia del movimiento popular, los que en definitiva son cara visible de cada cuadra, de cada calle, de cada vereda, y quienes resultan como los "responsables" de que la comida no alcance para todos. Cosa que es una farsa, pues ejemplos abundan, de que para unas comunidades la cosa es de a poquito y para otras hay para todos.

En una entrevista al sub-comandante Marcos del EZLN, en los años 90' éste afirmaba que: La vida no tiene sentido sin la dignidad y la esperanza, pero con miseria y hambre era muy difícil alcanzar estos valores. Así que nos toca, de nuevo, reconstruir voluntades, y para eso hay que abandonar las ambiciones de la lógica partidista, y al mismo tiempo impulsar lo emergente, para que nazca lo que tenga que nacer, pues el empuje popular viene a ser el reflejo de la nueva sociedad, una solidaria, colaborativa, corresponsable, amorosa, culta, trabajadora y libertaria.

Nos queda luchar por lo que nos queda de moral, de lo contrario no tendremos mañana. Plantarnos con dignidad ante la dirigencia y hacerle el reclamo histórico, no es sino elevar nuestra moral ante nuestra gente, único motivo de nuestra lucha.


Pásennos la aplanadora del partido de gobierno. No importa, bastante moral tenemos para defendernos.


Para todxs, todo. Para nosotros nada, sólo la consagración de haber cumplido con el deber histórico.



Referencias:







martes, 9 de enero de 2018

De la Cultura Comunera, al Movimiento Comunero. Los andes Venezolanos en su largo proceso histórico.


Por: Carlos Rivasi.


Este texto fue expuesto y debatido, como ponencia en el 14 congreso Nacional

de Historia Regional y Local, celebrado en la ciudad de San Felipe

en el Estado Yaracuy, en el mes de Noviembre del año 2017.



En un primer momento pensamos en titular este análisis, De la cultura campesina al Movimiento Comunero, luego nos dimos cuenta que debía ser re-planteado todo el trabajo en función de exponer de forma coherente el argumento histórico que efectivamente demuestra que la lógica comunal es propia a los procesos sociales que se han desarrollado en buena parte del territorio que hoy compone la República Bolivariana de Venezuela. Sin forzar las ideas, ni manipular fuentes, ante nuestros ojos aparecen y re-aparecen, procesos históricos que hablan por sí mismos, advirtiendo que la sociedad que actualmente compone la República Bolivariana de Venezuela, viene resistiéndose a la implantación de ideologías foráneas.

Con esto podemos advertir que la noción que comprenden "Las ideas fuera de Lugar", acuñada por Roberto Schwarz, representa una realidad que se resiste a abandonar lo que históricamente han sido los pueblos de lo que hoy es América. El Liberalismo, base epistémica de la modernidad, ha encontrado, y de hecho encuentra resistencia en las formas organizativas del pueblo, porque en definitiva constantemente tratan de rescatar la identidad que los ha definido en la larga duración.

Conceptos como el de Toparquía, elaborado por el genio de Simón Rodríguez, están latentes a lo largo del tiempo en nuestro territorio. De-construir el poder desde una nueva territorialidad es una tarea pendiente, ante la cual se han venido haciendo aportes interesantes, como el de la Red nacional de Comuneros, quienes en el 2014 publicaron un texto titulado La Toparquía Comunera, concreción de la utopía, en este trabajo a varias manos se afirma – y compartimos dicho criterio- que: la comuna no se decreta, nace a partir de las experiencias vividas, se define como un proceso de intercambio de saberes, del alcance de logros mancomunados, de reconocimiento y respeto del otro, de luchas y resistencias compartidas. Los proyectos de conformación de comunas deben tomar en consideración la importancia de la autodeterminación económica y política (2014; p. 23). Y es que en definitiva la cultura política dominante, colonial, dependiente y alienante, nos ha sumergido históricamente en una cultura paternalista que ha castrado en gran medida el potencial organizativo del pueblo, y las posibilidades para volver a ser pueblo vivo, pueblo solidario, pueblo comunero en libertad.


Los comuneros originarios.


Iraida Vargas y Mario Sanoja, en su texto La larga marcha hacia la sociedad comunal (2015), exponen de manera sistemática el proceso por el cual ha atravesado la sociedad Venezolana, siendo evidente que la cultura comunera marca de cierta forma nuestras raíces históricas. La relación con el territorio, en términos geo-históricos, indican procesos de larga data, los cuales según los autores (2015; p. 37-38-39) marcaron la organización espacial en la colonia, la misma que dio paso luego a la organización político-territorial del Estado nación moderno. En el área andina, los pueblos Muku's de filiación lingüística Chipcha (2015; p. 50), consolidaron un sistema societal complejo, el cultivo en terrazas, con regadios para las mismas, y silos subterráneos para guardar las cosechas (2015; p. 50), conocidos como Mintoyes, los cuales servían como resguardo colectivo de la producción comunitaria.

En esa organización, el Mohán representaba la máxima autoridad, cumplía funciones de sacerdote y administrador, relacionando el vínculo espiritual con los procesos productivos, estimulando de igual forma el intercambio de la producción con pueblos Kaketíos ubicados en las zonas bajas de lo que hoy son los estados Lara y Falcón (2015; p. 51), una economía solidaria de intercambio marcaba la cotidianidad de los pueblos andinos pre-colombinos. Lo que se conoce como la fachada Andina Venezolana (2015; p. 50), se desarrolló a partir del uso espacial, la puesta en marcha del dominio territorial con el uso efectivo de corredores de intercambio que permitieron el dinamismo de toda la zona comprendida al rededor de la cuenca del Lago de Maracaibo, los andes Venezolanos y los Andes Colombianos. Los que podríamos denominar, economía solidaria de intercambio, fundamentó la cotidianidad de los pueblos originarios de los andes venezolano previo a la llegada del europeo.

Por su parte Jacqueline Clarac, en su texto La cultura campesina en los andes Venezolanos (2016; p. 75-76-77-78), tomando como referencia las investigaciones de Tulio Febres Cordero y julio Cesar Salas, hace todo un bosquejo histórico de lo que fueron las poblaciones andinas, los territorios habitados, y sus principales características lingüísticas:

Según Salas, los grupos que pertenecían a una misma "tribu mucu" serían: los mucuhíes, los mucurubáes, los mucusiríes, los mucujunes, los mucaquetaes, los mucarias (nombre que por cierto tiene en la actualidad un corredor comunal ubicado en plena ciudad de Mérida), los mucutucúas, los mucumbáes, los mucusquis, los mucuunes, los mucutíes, los mucuñoques, los mucubaches, los mucurandaes, los tabayes, los tateyes, los escagueyes, los chicuyes, los guaques, los jajíes y otros más -todos sedentarios- pues eran agricultores y estaban ubicados en la región que hoy distinguimos como "estado Mérida" (2016; p. 79).


Dejando en evidencia el complejo proceso social que se desarrolló en lo que hoy día conocemos como los andes merideños, una compleja red social, en la que la cotidianidad era marca por fuertes valores solidarios, los cuales permitían la reproducción de la vida.

La colonia y la "campesinización" de la vida indígena.

Nuestros pueblos originarios, en un primer momento no eran sociedades campesinas tal y como se concibe en la actualidad, consideramos en ese sentido, que esto fue un proceso de re-ordenamiento territorial, de un re-planteamiento cultural, a partir de la conversión de la tierra en mercancía, situación esta que se exacerbó en la colonia, con el proceso de Repartimiento y encomienda, propios de la re-organización societal implementado por el control español en el territorio de los andes Venezolanos. La propiedad de la tierra era una concepción absolutamente desconocida por las poblaciones indígenas en los andes Venezolanos, lo común formaba parte del devenir cotidiano, por tanto, el proceso posterior a la llegada del europeo, va a consistir, no sólo en desarrollar la noción de propiedad sobre la tierra y sobre los cuerpos, sino en implementar una cultura del robo y apropiación de la fuerza de trabajo del individuo en resguardo.

En Población indígena y economía (1995), Nelly velásquez hace referencia, también, a los mecanismos de evangelización y patrones de resistencia (p. 53-57), en ellos encuentra elementos claves que fueron utilizados por los españoles para garantizar que el proceso de adoctrinamiento fuera efectivo, entre otros tenemos que: la existencia en el pueblo de indios, de un cura doctrinero; conocimiento de las lenguas autóctonas por parte de los misioneros; existencia de una iglesia; empleos de registros escritos; obligación de enterrar a los muertos al interior de las iglesias. Todos estos procesos de implantación encontraron resistencia, al punto, que pudo coexistir a lo largo del tiempo lo accidentario originario con lo implantado.

La vida comunal se veía interrumpida a causa del pago de tributos, la producción para el intercambio sería suplantada definitivamente por el trabajo usufructuado por el encomendero. Este inconveniente aparece en forma patente en el pueblo de Chachopo, donde los indígenas desempeñaban

funciones de arrieros durante todo el año en el transporte de tabaco desde Barinas hasta el puerto de Gibraltar (Velásquez. 1995; p. 59). Se trastoca a profundidad toda relación social, desde el intercambio hasta la existencia de los cuerpos mismos, los cuales se verán reducidos a objetos serviles, negando todo el acervo cultural existente hasta el momento. Sobre esto último, hasta la erótica amerindia se ve influida por lo que será una geopolítica territorial del dominio de los cuerpos. Sobre todo este esplendor cultural:

... cae como ave de presa el yo conquisto, con carabelas y armas de hierro y fuego, con devoradores perros y lujuria largamente retenida (ya que el conquistador venía solo, sin mujer hispánica)... El Varón hispánico mata al varón indio o lo reduce a la servidumbre por la encomienda, la mita, etc.; la mujer del indio pasa al servicio personal o al simple amancebamiento (concubinato adulterino) con el conquistador... (Dussel, 2007; p. 20)


En ese sentido, la colonia se convierte en un campo interesante de estudio, desde la interdisciplinariedad, pues en ese largo tiempo histórico se fundan los elementos que darán pie a la construcción de nuevas relaciones sociales entre los pueblos amerindios. En medio de este proceso traumático, se construyó la "americanidad" y las relaciones sociales que le dan sustento a nuestros países, dando cuenta del surgimiento de nuevas clases sociales que sobre el territorio ejercerán poder, dominando la cultura, organizando la nueva territorialidad, espacial y corporal, para cumplir con sus fines comerciales.

El Movimiento Comunero, la descolonización de la memoria y la construcción de la soberanía emancipatoria.


A partir de la segunda década del siglo XXI, los planteamientos político-sociales, que implican a su vez procesos organizativos del pueblo, pretenden radicalizar procesos emancipatorios. Como se trata de volver a las raíces, escudriñamos en el pasado y encontramos en la re-significación comunera posibilidades reales de avanzar en la tarea por descolonizar la memoria y avanzar en la concreción de un proyecto histórico emancipador, que de cuenta de nuevas realidades, que evidencie la posibilidad de hacer las cosas de forma diferente.

En ese sentido la construcción de las comunas a lo largo y ancho de lo que hoy es el estado Mérida, va aparejada con el uso geoestratégico de corredores comunales, los cuales territorialmente buscan implementar nuevas formas de entender la producción y la economía. Hoy día en el estado Mérida existen once (11) corredores comunales, los cuales tienen la intensión de activar los procesos de intercambio propios de una economía solidaria. Desde el páramo, hasta la meseta de Mérida, pasando por Lagunillas, Chiguará y el Anís, el valle del Mocotíes, los pueblos del sur, la zona Panamericana, el Municipio Andrés Bello, todos ellos conjugan corredores comunales que invitan a la gente organizada a retomar viejas prácticas de intercambio, retomando rutas originarias, re-planteando la cultura cotidiana, cuestionando las ideologías dominantes. Por ello es necesario reconocer que:


El pueblo, el bloque social de los oprimidos y excluidos, puede transitar durante siglos dentro de un "estado de derecho" de obediencia pasiva, ante una legitimidad aparente... Cuando ese "pueblo" (dicho bloque de los oprimidos) se torna "pueblo para-sí" o toma "conciencia de ser pueblo", abandona la pasividad de la obediencia cómplice ante la dominación encubierta bajo una hegemonía que en verdad no cumple con sus necesidades, y entra en un "estado de rebelión" –lento proceso que puede durar decenios, a veces siglos (citado en: Vargas. 2015; p. 230).



En ese largo proceso de organización, por ejemplo, para Octubre del 2012, se trabajaba en base a 10 corredores en todo el estado Mérida, a saber: Characot Apirat, compuesto por 7 comunas, y 86 Consejos Comunales; Aroma del Cacao, Compuesto por 8 Comunas, y 84 Consejos comunales; Rumbo a la Independencia Soberana, Compuesto por 14 Comunas, y 119 Consejos comunales; Campaña Admirable, Compuesto por 8 Comunas, y 86 Consejos comunales; Mucaria, Compuesto por 4 Comunas, y 57 Consejos comunales; Urbano, Compuesto por 4 Comunas, y 27 Consejos comunales; Padre Noguera, Compuesto por 3 Comunas, y 86 Consejos comunales; Mocoties, Compuesto por 5 Comunas, y 49 Consejos comunales; Chama Sur, Compuesto por 5 Comunas, y 84 Consejos comunales; y Hugo Chávez, Compuesto por 12 Comunas, y 100 Consejos comunales.

Ilustración 1.













Los corredores comunalesii, que en la actualidad se ponen en ejercicio, vienen a romper con la organización eclesiastico-colonial que dio pie a la dominación de los pueblos amerindios, reconociendo el uso del espacio de las poblaciones americanas antes de la llegada del europeo, para re-pensar la acción cotidiana. En ese sentido y después de lo visto, es necesario recomponer el tejido social, pues han sido muchos años en el que la estructura societal y sus aparatos ideológicos han propiciado un individualismo negador de la vida misma. Es decir, la crisis civilizatoria en la que se encuentra la humanidad no puede ser resuelta con más competencia entre los habitantes de determinado territorio; volver a lo comunitario es avivar el espíritu comunero, que en última instancia siempre ha estado vivo, siempre ha estado presente en nuestra memoria colectiva.

Nuestra comuna, en el marco de la gesta emancipadora en curso, la denominamos "Bicentenario 16 de Septiembre", más allá del debate histórico del momento, consideramos fundamental alimentar el espíritu insurgente de un pueblo que viene dando una batalla de larga duración, donde la simbología rebelde siempre está en peligro de ser cooptada por la clase dominante y su ideología. Pretendemos construir nuevos lazos sociales, volviendo a las raíces y cuestionando en profundidad las viejas formas de hacer política. "Comunalizar la vida misma" es un reto que exige de un esfuerzo interdisciplinar, que edifique un pensamiento crítico que nos sirva como herramienta para desmontar las "verdades absolutas" que desde el romanticismo europeo concibieron al resto de mundo, en especial sus colonias, como sucursales de lo que se dice, se hace y se piensa en los centros de poder.

En ese orden de ideas es fundamental estar atentos, desde lo simbólico e ideológico, hacia donde tributan nuestras acciones, pues si replicamos por ejemplo la experiencia Liberal, de la división de poderes, estaremos por el contrario "comunalizando" la ideología de la clase dominante; estar alertas, con la cabeza y el corazón bien puestos, pues hay una infinidad de detalles que están representados en las menudeces de la cotidianidad. La comuna se construye todos los días.

Reconocer que en nuestro pueblo hay un saber, hay un uso y dominio del territorio, hay un acervo que debe ser sistematizado, nos abre la posibilidad de construir un nuevo conocimiento que sirva de herramienta para tejer la emancipación definitiva.

Nuestra labor, desde el compromiso militante, y de eso estamos convencidos, es darle sentido a las luchas por las que nuestro pueblo ha dado su vida. Nos queda un mundo por descubrir, por investigar y por construir.


Bibliografía:

  • Clarac, Jacqueline. La Cultura Campesina en los Andes Venezolanos. Colección Alfredo Maneiro. Serie Identidades. Fundación Editorial El Perro y la Rana. Caracas. 2016.

  • Dussel, Enrique. Para Una Erótica Latinoamericana. Misión Cultura Corazón Adentro. Fundación Editorial El Perro y la Rana. Caracas. 2010.

  • Jiménez, Atenea (Comp.). La Toparquía Comunera, concreción de la utopía. Red Nacional de Comuneros. Barquisimeto. 2014.

  • Vargas, Iraida y Mario Sanoja. La Larga Marcha Hacia la Sociedad Comunal. Tesis sobre el socialismo Bolivariano. Colección Alfredo Maneiro. Serie en la Historia. Fundación Editorial El Perro y la Rana. Caracas. 2015.

  • _____________________. Historia Identidad y Poder. Editorial Galac. Caracas. 2013.

  • Velásquez, Nelly. Población Indígena y Economía. Mérida siglos XVI y XVII. Universidad de Los Andes. Consejo de publicaciones CDCHT. Colección Ciencias Sociales. Mérida. 1995.

NOTAS:

iProfesor Universidad Politécnica Territorial del estado Mérida "Kléber Ramírez", PNF Psicología Social- PNF Historia. Profesor PNF Economía Social UNEFA Mérida.

ii Ilustración 1: Consultado en Septiembre de 2016. Disponible en: https://tatuytv.org/index.php/aqui-tatuy-informa/1695-infografia-corredores-comunales-del-estado-merida